Nayarita.com del encantamiento al estancamiento…

Lo que parecía ser un espacio vivaz  del Nayarit internético o abrevadero cultural estatal  completo, con aportaciones generosas de colaboradores nativos destacados, se ve cruelmente paralizado actualmente.
La página admirable, con aglutinamiento regional generoso intentando resaltar la positividad de cada municipio como pieza clave a un todo estatal, yace cual flor marchita por abulia del jardinero.
Con tecnología cibernética avanzada destacaba por sobre todos los demás sitios similares pero muy regionalizados de la geografía nayarita. Sitios casi familiares por tan reducida o nula influencia social.
El espacio brindado a cada uno de sus veinte municipios, que avanzó acorde a la colaboración de los involucrados en cada entidad, súbitamente se paralizó a toda participación formal.
Las aportaciones fotográficas recientes ya no tienen cabida ni lugar alguno en tan importante escaparate de promoción ilustrada de alcance mundial que proyectaba imágenes de arte mural, artesanías, paisajes, personajes festejos cívicos y lugares turísticos.
Las narraciones evocando al nostálgico pasado mediato e inmediato, las vivencias plasmadas por escrito de sus  -todavía-  fieles colaboradores, quedan constreñidas a dos foros con caducidad pronta, y las aportaciones valiosas desaparecen en la dimensión de lo efímero.
Temas referentes a la problemática estatal se han abordado en dichos foros. Se ha planteado lo relativo al inconstitucional  impuesto por tenencia automovilística  sugiriéndose a la vez el recurso efectivo de amparo federal para no pagarlo.
Lo anterior expuesto y analizado en la página nayarita, del estado que  -colmo de los colmos-  sigue cobrando tenencia a todo vehículo, aunque se hayan rebasado los diez años de antigüedad que fija la federación. Esto por obra y gracia del gobernador Celso H. Delgado y Congreso Legislativo local de dicha época aciaga.
El conglomerado internético que con diversidad alegórica ha mantenido vivos los foros merece reconocimiento por su insistencia cotidiana en pro de la hermandad nayarita virtual.
Arturo Ron Ulloa, Hugo Humberto Rodríguez Medina, Misael de Santiago Velasco, José Antonio Ortiz Meza, Gregorio García González, José Narno Rivera Tejeda, Reynaldo Ballesteros, Alejandro Rivera, Alejandra Tovar Tinoco, Francisco Javier Chávez, Iván Abdul Hernández Pantoja, José Elías García, Rigoberto Magaña, Héctor Manuel Becerra, Gloria González, Regino Zamorano, Jorge Rivera Reyes, Moisés Rivera Reyes y Leopoldo Rivera formamos la parte plenamente identificada del grupo participativo y algunos nos cuestionamos sobre el paradero y la actitud  de indiferencia reciente y la adinamia preocupante de Rodolfo Parra Becerra creador de la página.
Con ideas innovadoras y originales, el sitio cibernético marchaba actualizado y triunfante aunque algunos intentos novedosos quedaron constreñidos a una sola región, privando a la página estatal de exposiciones interesantes.
El llamado cybermausoleo o sección para dar a conocer los fallecimientos quedó vigente sólo en la sección de Amatán, privando al resto del estado de un apéndice virtual para homenajear a los finados.
Se requiere la reactivación vivificante y también establecer en la página nayarita.com un sitio necrológico del que actualmente carece para rememorar la vida y homenajear la obra de los ausentes.
¿Cómo rendir tributo actualmente al familiar, conocido o destacado personaje de la más variada entidad nayarita?
¿Cómo dar a conocer estatalmente sobre las defunciones recientes?
¿Cómo manifestar públicamente la pena ante el deceso de un Baltasar Cruz Dueñas contemporáneo compostelense de toda la vida fallecido apenas el pasado 14 de febrero?
¿Cómo no poder narrar en un espacio idóneo la biografía del amigo que, con carencias económicas, esforzadamente emigró a la deshumanizada ciudad de México buscando su profesionalización como Contador Público y logrando a su regreso ser electo como Presidente Municipal de su pueblo?
¿Cómo destacar que habiéndose desempeñado en diversos puestos de las administraciones federales, estatales y municipales logró imponer su honradez acrisolada sin enriquecerse al amparo de la función pública?
¿Cómo darlo a conocer a todo mundo, si la página nayarita.com con archivo de capacidad magna y con difusión internacional permanece estática e inactiva?